Eres más fuerte de lo que te puedes imaginar. Capaz de amar, perdonar y soportar. Capaz de dar segundas oportunidades y superar cualquier obstáculo que la vida te ponga en frente. (Prov 31:25)

Dios te ha diseñado con un corazón grande, tan grande como para poner siempre a los demás antes que a ti misma. Por eso te conviertes en el reflejo de la naturaleza generosa de Dios. (Juan 3:16)

Mujer sensible, siempre preocupada por proveer, por dar, por cubrir y cuidar. (Prov 31:21) Dios te eligió para concederte el privilegio de dar vida, de albergarla y sentirla en tu interior. Te dio el don de procrear y prolongar, el don de dar vida.

Juegas un papel esencial en la historia de Dios. Tu dulzura y ternura brindan un aporte único y significativo a los planes del Creador, quien te invita a colaborar con su sueño, porque sabe que tienes mucho para dar.

Mujer de oración. Eres un ser confiable y obediente, de manera que tu Padre puede contar con tu corazón sensible para responder en un clamor genuino y sincero. ¡Arma poderosa es tu intercesión!

Mujer creativa, proactiva y llena de recursos. Tu mente es la pista de aterrizaje de las mejores ideas del cielo. Mujer constante, luchadora y determinada. Cuando te propones algo, te esfuerzas hasta verlo hecho una realidad. (Prov 31:18)

Mujer diamante, que reflejas el brillo de la gloria de Dios a donde vas, e iluminas con tu presencia hasta el lugar más oscuro. Eres un modelo y ejemplo para las generaciones que vienen después de ti. (Prov 31:10)

Caja de sorpresas. Tienes el potencial para alcanzar lugares que ni te habías propuesto, porque el favor de Dios va abriendo puertas delante de ti.

Tus hijos te admiran. Tu pareja te elogia. (Prov 31:28) Tu Padre del cielo tiene expectativas contigo y te mira con ojos de inmenso amor. Eres su niña, su obra fuerte y delicada, su motivo de orgullo.

¡Celebra el ser MUJER!

Carina Valerga